Bienvenidos a mi blog

Sólo pretendo expresar mis estados de ánimo y comentar algunas de mis ideas sin más pretensiones que el desahogo personal aunque agradecería mucho vuestros comentarios, vuestros puntos de vista. De todo se aprende, todo me puede valer.

Datos personales

Perigord y valle del Dordogne

VALLE DEL DORDOGNE Y REGION DEL PERIGORD - FRANCIA

Siempre he pensado que Francia es una gran desconocida para los españoles. Mucha veces nos limitamos a pensar en París, Eurodisney, los Alpes y al Costa azul.
Pero existe una Francia rural de interior realmente encantadora con buena gente, buena gastronomía y unos paisajes y pueblos realmente bellos.
Con unas carreteritas donde se vuelve a recuperar el placer de conducir. el ir a 70 - 80 Kms/hora contemplando paisaje.

Esta zona concretamente está relativamente cerca de España y bien comunicada. Se puede ver perfectamente en un viaje de cuatro o cinco días y el buen sabor de boca que te deja y la tranquilidad que respiras hace que sea una escapada realmente agradable.

He visitado la zona  seis veces y siempre descubres algo nuevo

Sólo reseñaré los lugares que pienso que son imprescindibles de visitar y que cada cual se planifique su ruta diaria. Las distancias son cortas entre los pueblos y pueden visitarse muchos lugares.

DATOS GEOGRÁFICOS

La región está situada al suroeste de Francia, más o menos en paralelo a la ciudad de Burdeos, a una distancia aproximada de 700 kms desde Valladolid y con las tres poblaciones más importantes haciendo una forma de triángulo: Perigueux al norte, Bergerac al Oeste y Cahors al sur.
El clima es muy similar al de Castilla, menos frío y algo más lluvioso. Todo el terreno es ondulado con colinas, bosques, maizales, viñedos y pastos.
En extensión es algo mayor que la provincia de Valladolid y con menos población.
El río Dordogne es la columna vertebral de la zona.

CÓMO IR, DÓNDE ALOJARSE, COMER

La forma de visitar la zona es ir en coche. Las carreteras principales están en buen estado pero lo ideal es coger un buen mapa y perderse por las secundarias sin prisa.

Las autopistas francesas son de peaje. En general, no muy caras y con unas áreas de servicio excelentes. Todas las cabinas son automáticas, es decir, no hay nadie para cobrar y se paga con dinero o tarjeta.
 Es muy conveniente cogerla al cruzar la frontera hasta el cruce con la autovía a Mont de Marsan; ya que si no habría que ir por la carretera de la costa del País Vasco francés, que es muy bonito pero tiene un tráfico infernal.

Carreteras secundarias: Tienen buen firme y buen trazado. Carecen de arcenes asfaltados pero siempre con la hierba siempre bien cortada. Para adelantar no hay que fiarse de las líneas discontinuas sino de nuestro sentido común.

Los franceses conducen bien, tirando a despacio y no se ponen nerviosos por nada. Si alguna vez os pitan es que algo muy gordo se debe haber hecho

Combustible: Hay unas diferencias de precio enormes. Ni se os ocurra echar en las autopistas, donde el litro puede salir casi por un 30 % más caro. Lo mejor es echar en los múltiples Carrefour, Leclerc, Intermarche... que hay casi en cada pueblo. El litro de gasoil es más barato que en España y la gasolina prácticamente igual.

Para alojarse Francia ofrece multitud de modalidades y precios. Desde los hoteles baratos tipo Formule1 donde la triple con baño te puede salir por menos de 30 euros con una limpieza más que aceptable, hasta los hoteles convencionales con precios similares a los españoles.
Desde luego lo mejor es alojarse en las chambres d´hotes, que están por todos lo sitios. Son particulares que alquilan habitaciones con baño y desayuno con precios que pueden oscilar entre 40 y 80 euros la doble con desayuno. www.gites de france.com

Comer: La gastronomía de la zona está basada en su producto estrella: El pato (canard). en todas sus variantes. Desde el paté, a muslos de pato, ensaladas de pato...
 El otro plato típico de la zona e s la Cassoulette: una especie de fabada al horno con carne de pato. Muy rico y contundente

Hay apreciables diferencias entre los precios de la comida y las cenas. Se puede comer muy bien un menu con primero, segundo y postre por 14 Euros o el plato del día (plat du jour) que es un plato fuerte con guarnición por 10 Euros. El agua es gratis, salvo que la pidas embotellada, y te la suelen poner por defecto.
El vino es caro en relación calidad - precio.

Las cenas pueden ser un 20  ó 30 % más caras que las comidas.

El horario bueno para comer es la una del mediodía y las 8 de la tarde para cenar y es mucho más que conveniente no alejarse mucho de este horario.

QUÉ VER

Rocamadour


Lugar de pregrinación por su templo excavado en la roca y dedicado a la Virgen Negra es un lugar de extraordinaria belleza con el Santuario y el pueblo colgados en los cortados de la colina sobre el valle del río Alzou.







Collonges la rouge


Pueblo medieval llamado así por el color de la piedra arenisca utilizado para la construcción de todos los edificios del pueblo.

Un lugar encantador para perderse por sus calles y sentarse plácidamente en una terraza.







Domme


Espléndido pueblo medieval fortificado en el borde de un acantilado que se asoma al valle del Dordogne con unas vistas magníficas.







 Cuenta con notables edificios de la Edad Media y una preciosa plaza del mercado








Sarlat la Caneda

 Impresionante ciudad medieval. Es una localidad relativamente grande con más de 10.000 habitantes  el lugar más visitado de la zona y su principal reclamo turístico.

Todo el casco histórico data de los siglos XV-XVI y está repleto de eificios góticos y renacentistas con una piedra de color dorado que le da un toque característico a la ciudad



Es muy aconsejable visitar esta ciudad coincidiendo con el mercado semanal de los sábados donde las plazas y calles se llenan de puestos de artesanos y de productos de alimentación de granjeros de la zona.







Beynac et Cazenac - La Roque Gagueac



Otros dos pueblos medievales prácticmante juntos a orilla del Dordogne


Para pasear tranquilamente y relajarse.












St Cirq Lapopie

 Precioso e intacto pueblo medieval situado a orillas del río Lot, con un entorno natural y paisajístico muy bello.

La ruta por la carretera al lado del río es espectacular









Otros pueblos dignos de ser visitados: Martel, Belves, Castelnaud la Chapelle, Souillac, Figeac.

En cuanto a las localidades más grandes: Perigueux con su catedral patrimonio de la Humanidad, aparte de un bien conservado casco histórico con buenos comercios y restaurantes.

Cahors: con un perfecto puente medieval y un casco antiguo plagado de comercios

Reseñar que cerca de Sarlat se encuentran las cuevas de Lascaux, es decir, el Altamira francés, que al igual que éste no se puede visitar; pero sí la réplica.

Sí puede visitarse la cueva de Padirac, cerca de Rocamadour. Realmentre es una sima enorme a la que se desciende en ascensor al río subterráno que se visita en barca.


LA RUTA DE LAS BASTIDAS

Entre Bergerac y Cahors hay numerosos pueblos denominados "Bastides". Son pueblos medievales con trazado rectangular y la plaza del mercado cuadrada en el centro.


Originariamente todos estaban fortificados aunque ahora quedan pocos restos de murallas, pero sí es conveniente visitar algunos como Monpanzier, Villefranche du perigord, Monflanquin, Issigeac, Beaumont du Perigord.

Son pueblos pequeños y merece la pena parar en alguno, dar un paseo y tomar algo en sus terrazas





Nazaré y alrededores (Portugal)

Nazaré 25 a 29 de agosto de 2012 (Portugal)

  • Algunos datos útiles: 

Debido a la crisis todas las autovías en Portugal son de peaje, además de las autopistas clásicas de peaje, con la diferencia y el engorro que en aquellas no se han instalado cabinas de cobro sino peajes automáticos vigilados con cámaras. El medio de pago, duración y funcionamiento lo podéis ver en la página www.visitportugal.  Yo hice todo el viaje por carreteras nacionales y secundarias, para lo cual es mejor entrar también por un puesto fronterizo secundario. Realmente es la mejor manera de conocer el país y los portugueses ya no conducen como lo hacían antes.

La gasolina es más cara que en España y con grandes diferencias de precios entre estaciones de servicio que pueden llegar hasta los quince céntimos. Lo mejor es echar en los centros comerciales y supermercados. La cadena de supermercados "Pingo doce" están por todos los sitios y en muchos de ellos hay surtidores.

El tráfico es muy fluido y no hubo ninguna incidencia reseñable. En las localidades de playa conviene llegar pronto para aparcar sin dar muchas vueltas. En las de interior no hay ningún problema.

Se come muy bien y barato. El plato del día que ofrecen en todos los restaurantes es una forma de comer rápido y por muy poco dinero. Eso sí, atención a los horarios y no descuidarse. La una de la tarde es buena hora, y cenar entre las ocho y nueve. En los lugares de playa se relajan un poco.

Caso aparte son las "Pastelarias" (pastelerías) a la que los portugueses son muy aficionados ( y yo también). Abundan por todas partes y están genial para tomarte un batido o café con un pastel o bollo a precios realmente bajos. A media tarde parar a comer algo sienta de maravilla.

Los hoteles, por regla general, son muy limpios aunque sean modestos. Tienen muy buena relación calidad-precio, casi siempre incluyen desayuno y éste merece la pena.

Las playas están limpias y cuidadas. Eso sí son aguas atlánticas y están fresquitas además de contar con buenos oleajes por esta zona.

El clima es parecido al de Galicia,  más caluroso de día.Ningún día pasamos de 27 grados ni bajamos de 16. Muy, muy agradable.




  • El Viaje

Queríamos ir cinco días al mar, a un sitio que no fuese caro en agosto y atractivo a la vez. Así que  elegimos Portugal y la zona en concreto: Nazaré.

Vistas desde la habitación

Cogimos cuatro noches en la localidad cercana de Alcobaca, a doce kilómetros de Nazaré.

Hotel Santa María con vistas al impresionante monasterio de la ciudad. 50 pavos la doble con muy buen desayuno y aparcamiento.






La intención era ir cada día a una playa por la mañana, comer y después hacer ruta por el interior para visitar pueblos.


Salimos el sábado por la mañana desde Valladolid para cruzar la frontera por la localidad salmantina de La Fregeneda para conocer así la zona de Vitigudino, Lumbrales...con unas dehesas inmensas, plagadas de encinas.
 Una zona muy deshabitada con un paisaje precioso.

  

 Ya en portugal visitamos el pueblo de Castelo Rodrigo, enclavado en una montaña con todas sus calles empedradas al igual que las casas rodeando el castillo.
Un pueblo pintoresco con muy poquita gente.




Continuamos camino hasta la ciudad de Guarda para comer. Aquí cayó el primer bacalao en un restaurante peqeñajo con precios tirados: 7 euros el plato del día que era un bacalao imponente.

Ya sin más paradas emprendimos marcha hasta Alcobaca para tomar posesión de la habitación y salir a dar una vuelta por el pueblo a comernos unas francesinhas, bocadillos calientes de jamón, queso y tomate, que con unas cervezas y un pastel pues te quedas tan pancho para ir a dormir.

Domingo 26

Nos levantamos pronto para ir a la playa a la localidad de Martinho do Porto. 
Una localidad muy de veraneo con una playa muy bonita en una ensenada natural. el pueblo en sí no tenía gran cosa ya que todo eran apartamentos y casas de veraneo.

En la playa estuvimos tirados toda la mañana hasta la hora de comer en un local cutrillo pero con precios baratos.



Por la tarde nos acercamos a visitar la ciudad de Caldas da Rainha.

Como era domingo no había nadie por las calles salvo en un parque precioso situado en el centro de la ciudad donde se ubica el hospital termal de la ciudad y los antiguos edificios del balneario, hoy lamentablemente abandonados pero que me parecieron de gran belleza.







De aquí fuimos hasta la ciudad de Santarem situada en un alto junto al río Tajo. Toda la parte antigua está muy cuidada con calles estrechas de piedra lisa blanca y plazas, como la de catedral, impresionantes. Todo el casco antiguo está plagado de tiendas pero como era domingo parecía que una bomba nuclear había estallado y acabado con la población porque estaba todo cerrado y desierto. No había nadie por la parte alta de la ciudad así que nos dirigimos a la baja para cenar y tuvimos que acabar en un McDonalds muy a nuestro pesar.

Lunes 27

Salimos por la mañana a Nazaré para ir a la playa hasta la hora de comer.
Este pueblo es realmente aconsejable por varios motivos:

El entorno que rodea la localidad con unos bosques de pinos muy densos.

Playa grande y cuidada.

Una parte del pueblo al lado del mar y otra en lo alto de un acantilado unido al de abajo por un funicular.


La conservación del antiguo pueblo marinero con calles muy estrechas y edificaciones de cuatro plantas muy juntas entre sí repleto de tiendas de las de toda la vida y restaurantes de todo tipo.

Un ambiente magnífico que no agobia en ningún momento con la curiosidad de decenas de mujeres sentadas por las calles sujetado carteles ofreciendo alojamiento.

Una gastronomía excelente basada en pescado y marisco, a precios insuperables. Nos comimos un arroz tamboril (Arroz con rape) riquísimo que nos pusieron en una cazuela que nos dio de sí para seis platos por 19 Euros los dos.

En fin, que cuenta con todo lo necesario para ir a visitarlo en cualquier época. IMPRESCINDIBLE.



Por la tarde fuimos de ruta por la Sierra dos Candeeiros sin mucho reseñable que ver debido a que se se nota que la zona ha sufrido incendios y poca zona boscosa queda.

Terminamos la ruta en Torres Novas donde dimos una vuelta a su casco antiguo y el castillo al anochecer.



Martes 28



Estaba la mañana con lluvia así que cambiamos la playa para la tarde y, por la mañana, nos fuimos hasta la ciudad de Tomar para ver su parte vieja y el convento de Cristo declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.




Ha sido la sorpresa más grande del viaje. Aparcamos al lado de la ciudad vieja, que es pequeñita pero muy cuidada con un parque precioso y un río donde se amontonan los peces. Tomamos un café y nos dirigimos andando hacia el convento que está emplazado en una colina boscosa.
He de decir que fuimos a Tomar sin referencias ninguna ni, por supuesto, del convento.
Es de origen Templario iniciado en 1162 con sucesivas ampliaciones hasta el siglo XVII. Por ello recibe influencias arquitectónicas desde la Edad media hasta el estilo "Manuelino" típico en Portugal





Ascendimos por la colina entre árboles y nos encontramos con un recinto amurallado impresionante que daba acceso a los jardines y huertas del convento.


Dimos una vuelta por toda la muralla y nos acercamos hasta el impresionante edificio en el cual no dudamos en pagar la entrada ( 9 €) para visitarlo, cosa que pocas veces hacemos.


Una vez dentro la visita la haces por libre y es increíble lo que llegamos a andar entre claustros, salas, pasillos, patios, subimos a terrazas, escalinatas, comedores, las cocinas y la impresionante capilla rematada con ua cúpula bizantina y numerosos frescos.




Había poca gente visitándolo y como todo el mundo está esparcido, en muchos momentos te encuentras solo caminando por larguísimos pasillos semioscuros con las celdas de los monjes a los lados.

Realmente es 100% recomendable esta localidad y, sobretodo, el Convento.



Acabamos muy tarde  la visita pero al bajar a la ciudad tuvimos suerte de encontrar un asador abierto donde comimos fenomenal un pollo a la brasa con o sé qué especias y patatas caseras.



El día mejoró y por la tarde volvimos hacia Nazaré a la playa Salgado, que es enorme, sin vigilancia y sin gente porque no se puede acceder con coche, éste hay que dejarlo al lado de un bosque y desde allí andar un cuarto de hora entre pinos y dunas para llegar al mar.
Fue un momento relax total para descansar un poco y leer.

Todavía no dimos el día por acabado y al atardecer nos fuimos hasta la cercana ciudad de Leiria para dar una vuelta y tomar algo.
Es una ciudad universitaria y se notaba porque en su parte vieja había multitud de bares en las estrechas calles, claro que al ser agosto lo que faltaban eran los estudiantes. Llegamos de noches y subimos en coche hasta el castillo para luego dar un paseo por el casco viejo de la parte baja de la ciudad.

Y aquí terminó el día al que sacamos un gran partido.


Miércoles 29

Día de vuelta a Valladolid.

Nos levantamos pronto para ir a la playa de Nazaré hasta media mañana y emprender el viaje de vuelta.

Atravesamos Portugal por carreteras secundarias para visitar el parque natural del río Zezere: Montes boscosos alrededor de un gran embalse y una carretera serpenteante para disfrutar de la conducción y de un paisaje impresionante. Paramos a comer a la salida del parque natural en la localidad de Sertá y cayó otro buen bacalao.




El fin de tomar esta ruta era llegar hasta el pueblo de Monsanto, que tenía fichado desde hace tiempo por unas fotos que vi en Internet. Se encuentra cerca de la frontera con España en paralelo casi con las Hurdes cacereñas.


Todo el tiempo hasta llegar allí fuimos por carreteras secundarias y un paisaje similar al extremeño, con pueblos pequeñitos pero bien conservados hasta llegar a Monsanto, una aldea histórica de Portugal y a decir de sus vecinos  "La aldea más portuguesa de todo Portugal"



Es un lugar realmente increíble.

Construido en la edad Media sobre un monte de granito, el pueblo se confunde entre las rocas, algunas de ellas de tamaño que dan miedo.

Pasamos aquí unas dos horas y nos hicimos la ruta que lleva al castillo desde donde se contempla un horizonte impresionante.
Como no se puede resumir en palabras dejo unas fotos y podéis buscar en internet algún reportaje de buenos fotógrafos.



Aquí dimos por finalizado el viaje y salimos a España por otra frontera en la provincia de Salamanca de estas que usarían los contrabandistas y, sin más novedad, a las once de la noche llegamos a Valladolid.





Escapada cervecera a Munich

En 2002 nos hicimos un viaje por Europa dos amigos, mi hermano y yo. Uno de los sitios visitados fue Munich y, en plena orgía de cerveza, firmamos que diez años después volveríamos otra vez los cuatro solos.
Como las promesas se cumplen; a primeros de agosto de 2012 volvimos, en una escapada intensa de cuatro días.

El tema económico, desgraciadamente, primaba así que había que sacar un viaje barato, barato. Como un vuelo directo a Munich valía una pasta, decidimos volar a Frankfurt-Hanh con Ryanair para allí alquilar un coche hasta Munich. Con la diferencia de precio de billetes pagamos el coche, gasolina y alojamientos.

El tema de la pasta se desglosa así:

Vuelo Santander - Frankfurt ida y vuelta: 95 €

Gasoil coche ida y vuelta a Santander: 50 €

Párking de coche en el aeropuerto cuatro días: 36 €

Coche para cuatro días Hyundai i30 SW:  115 €  ( A dividir entre los cuatro)

Dos noches de hotel en Munich: 54 € doble con baño y desayuno  por noche

Una noche en Hanh: 75 € una cuádruple con baño y desayuno.

El tema de volar a Santander era porque a la vuelta nos podíamos quedar a comer en la playa para no venir inmediatamente a Valladolid.

Salimos de Valladolid para Santander y a las 12 horas partíamos para Frankfurt. Dos horas después aterrizábamos, bastante bruscamente, en el aeropuerto de Hanh situado a una hora en coche de Frankfurt.

En cuarto de hora estábamos instalados en el Hyundai y partimos hacia Frankfurt para dar una vuelta previa parada para comer en la autopista.



Llegamos a Frankfurt y aparcamos en el centro de la ciudad junto a la catedral. Estaban en fiestas y había un magnífico ambiente con muchísimos puestos de comida y bebida junto a la orilla del río Main y en la Rommel Platz, que es el centro neurálgico de la ciudad vieja de Frankfurt.
Cayó la primera cerveza de un litro en uno de los puestos y partimos en dirección a Munich.

De Frankfurt a Munich hay unos 400 Kilómetros por autopista. No había excesivo tráfico y el coche iba a todo lo que daba el pobre, así que en tres horas nos plantamos en la ciudad.

Sólo una breve reseña acerca de las autopistas y los límites de velocidad: Las autopistas alemanas se denominan autobahn (son las autopistas federales). Son todas gratuitas y con una velocidad máxima aconsejada de 130 Km/h; es decir, en principio no existe ningún límite de velocidad en ellas pero puede haberlos por circunstancias especiales como obras, tráfico intenso, climatología, etc... entonces los límites los indican perfectamente en las pantallas.
Nosotros cogimos poco tráfico, para lo que es habitual, lo que nos permitió circular entre 150 y 190 Kms/h durante gran parte del trayecto, pero no es lo normal porque tráfico hay mucho.
Eso si: Conducen muy bien, respetan tajantemente los límites de velocidad, guardan la distancia de seguridad y no ocupan los carriles de la izquierda salvo para adelantar. Los coches que hay por allí también ayudan ,todo hay que decirlo, porque menudos carrazos.

En fin, que llegamos a Munich, nos instalamos en el hotel, bien equipado y con parking gratis. Salimos a dar una vuelta por el centro de Munich a cenar algo que ya era bastante tarde (bendito Mac Donalds en estas ocasiones) y nos tomamos una cerveza en el Hard Rock Cafe. Había garitos con buena música, porteros a la puerta y alemanes/as arregladitos. Nos fuimos al hotel porque estamos reventados para aprovechar el domingo como Dios manda.

Nos levantamos pronto, desayunamos y cogimos el cercanías -metro que teníamos a 500 mts del hotel. Sacamos un billete de un día para los cuatro por 10 € que nos permitía usar metro, bus y tranvía.
Bajamos en Marien platz, equivalente a nuestra plaza mayor, y nos dimos un paseo matutino hasta la explanada de los museos y desde ah´nos hicimos algún kilómetro andando en dirección al palacio de Nyphemburg y lo que sería nuestra primera cervecería del día "Taxisgarten".
 Un jardín enorme con bancos y mesas para beber y comer o simplemente descansar. a la entrada del parque hay un edificio para pedir jarras de cerveza y comida.


Al acabar montamos al metro en dirección a la segunda cervecería del día: "Lowenbrau". Fue salir de la estación de emtro y darnos de bruces con la entrada. Tiene un edificio muy bonito y un amplio jardín para beber fuera.
Tienen un autoservicio para el jardín y nos cogimos otras jarras de litro y algo de comer. Ya íbamos bien.



Bajamos al metro otra vez y nos dirigimos a ver el Englisch Garten, que está considerado el parque dentro del centro urbano más grande de Europa. La verdad que es impresionante. Había cantidad de gente tomando el sol, en bicicleta, bañándose en los canales...nosotros nos dimos una vuelta y acabamos en una de las tres cervecerías que tienen que nos vino bien para resguardarnos de una tormenta de impresión. Aquí cayó otro litrazo.

Pasó la tormenta y fuimos a dar un paseo por el centro y ver la maximilianstrasse que es la calle del lujo en Munich, con buenas tiendas y cochazos por todas partes. Hicimos tiempo hasta al hora de cenar donde nos dirigimos, por fin, a la "Hofbrauhaus". La cervecería más famosa de Munich situada en todo el centro y en un precioso edificio. El lugar es enorme y esta a rebosar de gente aunque siempre hay sitio y atienden con rapidez. Aquí cayó otro litrazo o algo más y cenamos. No pudimos sentarnos en el mismo sitio de diez años atrás pero daba igual.

De aquí ya nos dirigimos al hotel porque llevábamos tralla en el cuerpo.

¿Qué cuánto costaba un litrazo? Pues entre 7,30 y 8 euros en todos los sitios. Siempre en jarras de cristal. Si no te entra la cerveza sola, puedes coger una "radler" que es lo mismo pero con limón.

Al día siguiente emprendimos marcha hacia el aeropuerto de Hanh, para hacer noche allí. Fuimos a visitar la ciudad de Nuremberg y comer allí.
La ciudad me pareció digna de ser visitada. Muy, muy alemana. Con un centro peatonal muy cuidado, con mucho ambiente y un castillo precioso rodeado de casa antiguas, me imagino que todas reconstruidas porque la guerra devastó la ciudad.

No pudimos visitar las explanadas donde los nazis hacían los desfiles. Para otra vez. Aquí también cayó algo de cerveza pero la comida para olvidar.




Siguiendo ruta visitamos el pueblo de Rothenburg

Un pueblo medieval amurallado precioso con bastante turismo, con calles empedradas y casa antiguas. Declarado patrimonio de la Humanidad por la Unesco, merece la pena.





De aquí fuimos directamente al hotel en un pueblo al lado del aeropuerto. Cenamos en un Mcdonalds e intentamos, en vano, buscar un bar para tomar la última jarra, pero sólo había pueblos pequeñitos y estaba ya todo cerrado.

Al día siguiente nos levantamos, desayunamos muy bien en el hotel con dos señoras que nos iban trayendo comida. Dejamos el coche de alquiler y cogimos el vuelo hasta Santander. Al llegar fuimos hasta Suances para comer y tumbarnos un poco en la playa.

De allí, a las siete estábamos en Valladolid.

Route 66 USA

  • Un poco de historia.
       Con el fin de abrir una vía de comunicación entre las Costas Este y Oeste de Estados Unidos que facilitara el desarrollo de esta última, así como el movimientode mercancías, en 1926 se inició la construcción de una carretera que terminaría en 1938 para unir las ciudades de Chicago en el Estado de Illinois con la ciudad de Los Angeles en el Estado de California. Como Chicago ya estaba bien comunicada con New York, de esta manera quedarían conectadas las dos costas de manera ininterrumpida.

Esta carretera de Chicago a Los Ángeles se denominaría Route 66 y su longitud total es de 3.939 Kilómetros. Con el paso del tiempo y el desarrollo de infraestructuras, la carretera original quedó prácticamente abandonada y en muchos tramos absorbida por las autopistas y vías férreas que ahora surcan todo el territorio de Estados Unidos.

Actualmente la Route 66 está descatalogada como carretera y sólo, gracias a movimientos culturales, ha vuelto a resurgir y en los distintos tramos que quedan de ella vuelven a verse hitos de señalización como Ruta 66.

Esta  ruta atraviesa los Estados de: Illinois, Missouri, Kansas, Oklahoma, Texas, Nuevo Mexico, Arizona y California.


  • Viaje
       Ahora esta antigua ruta es la gran excusa para irse de vacaciones a Estados Unidos y hacerla en coche, y así aprovechar para visitar los estados por donde discurre y algunas otras cosas aledañas.

Intentaré resumir mi idea de viaje que siempre he tenido en la cabeza para realizarlo en 17 días, aunque indudablemente si pudieran ser 20, pues mejor y así dedicaríamos algo más de tiempo para ver Chicago, Los Ángeles o Las Vegas.
En principio he de decir que mi viaje intentaría ser lo más aquilatado posible y lo más americano, es decir, dormir en moteles y comer en restaurantes de carretera al estilo de una "road movie".

Lo ideal sería viajar cuatro cinco peronas para alquilar un coche en Chicago y dejarlo en Los Ángeles desde donde volveríamos a Madrid.

Lo más caro con muchísima diferencia son los vuelos y en este punto no voy a indicar nada porque todo dependería de cuando se hiciera el viaje y poder coger alguan oferta puntual. En ocasiones buscando en internet he visto vuelos a Chicago por 400 euros con escalas hasta casi 2000 sin escalas.
Lo mismo ocurre con el vuelo desde Los Ángeles a Madrid donde el vuelo puede oscilarte entre 800 a 1800 euros cogiendo el billete en Estados Unidos.

Para el resto de partidas calcularé los preciso en dólares para hacer la conversión en euros cada uno según el día.

El alquiler del coche rondaría para dos semanas y con todos los seguros incluidos sobre los 1.300 Dólares en compañías de alquiler como Álamo. El coche, por supuesto, un crevrolet o similar y automático.

La gasolina para unos 4.800 kilómetros aproximadamente y a precios de marzo 2012 rondarían los 380 dólares. Precio del litro marzo 2012: 0,88 dólares.

En cuanto al alojamiento, es fácil encontrar habitaciones para cuatro personas en casi todos los moteles. Unos 25 dólares por persona y noche creo que es un presupuesto bastante real durmiendo en lugares un poco en condiciones.

  • Etapas, descripción y qué ver.
Días 1 y 2: Llegada a Chicago que es la ciudad más poblada del Estado de Illinois con 9 millones de habitantes en su área metropolitana.
Después del vuelo lo mejor es quedarse en Chicago un día más y de paso darse una vueltecilla por el centro  y ver un poco el lago Michigan. Lago por decir algo porque es bastante más grande que todo Aragón por ejemplo.


Como un día no es nada lo suyo es acercarse hasta la zona llamada        " The Loop " que sale en todas las películas con el río, el tren elevado y todos los rascacielos; además está allí toda la zona comercial de la ciudad y de ocio.

En Chicago se construyeron los primeros rascacielos de Estados Unidos y es donde se encuentra el más alto del país: La Torre Sears con 442 metros.
Es una ciudad con una alta calidad y nivel de vida, salvo su clima invernal que es terrible. Tiene una gran oferta de ocio y cultural con lo que un día sabe a poco pero menos da una piedra.

Día 3: Chicago - Saint Louis  478 Kms.


Gasolinera en odell desde1933
Salida por la interestatal I 55 y dirección a la ciudad de Saint Louis en el estado de Missouri. la ruta es llana y por el camino quedan vestigios de la ruta 66 con pueblos típicos americanos para visitar como Odell o Pontiac. Es una etapa adecuada para avanzar kilómetros. Depende del tiempo también puede pararse uno en Springfield, la capital del Estado de Illinois.




Saint Louis es la ciudad más poblada del Estado con 2.700.000 habitantes y está enclavada en las orillas del río Mississippi, por lo que es un buen lugar para parar a dar una vuelta, ver el río y tomarse unas cervezas por el centro antes de irse a la cama.





Día 4:Saint Louis - Springfield: 349 Kms.

Otra buena etapa para aprovechar a hacer kilómetros por terreno llano, atravesando bosques y saliendo en algún momento de la autopista a la antigua carretera que sigue conservándose en varios tramos para visitar pueblos típicos como Cuba, entregados en cuerpo y alma a la Ruta 66.



Seguimos hasta llegar a Springfield, ciudad con 160.000 habitantes, la tercera más grande del estado de Missouri, para dar tranquilamente una vuelta por sus calles, buscar algún garito y luego hacer noche.


Día 5: Springfield - Tulsa: 295 Kms.

A la salida de Springfield se encuentra otra gasolinera de época: "Gary´s gay parita sinclair" en la que el dueño y su hija la han convertido en una especie de museo de la ruta, pero lo bueno es hablar con ellos, tomarse algo y que te aconsejen.

Red oak
Cerca de allí se puede visitar el pueblo de Red Oak II, que es la recreación de un pueblo americano de los años 30 obra de un artista que decidió restaurar el pueblo donde él vivió.

Ruta 66 por Kansas
En esta etapa pasamos de Missouri a Kansas, cuyo recorrido por este Estado es de sólo 30 kilómetros aunque bastante aprovechables con pueblos decadentes y típicos de otras épocas  para adentrarnos ya en el Estado de Oklahoma con 180.000 Km2 y algo más de tres millones y medio de habitantes. Productor de petróleo y gas natural y con una economía e constante crecimiento, este Estado tiene la particularidad de los tornados y las  supertormentas ya que por su situación es donde chocan los aires fríos de Canadá con los cálidos del Golfo de México, dando lugar a tantas y tantas calamidades que vemos en la tele.

Seguimos la ruta hasta llegar a Tulsa que es la segunda ciudad del Estado donde paramos dar vueltecilla, ver el downtown con algunos edificios art deco y a la cama.

Día 6: Tulsa - Oklahoma city - Clinton:308 Kms.

Bricktown
Se puede viajar prácticamente por toda la antigua ruta 66, con establos, cafés de carretera y algo de decadencia hasta llegar a Oklahoma city, que es la capital del Estado y su ciudad más poblada con más de medio millón de habitantes. Buen lugar para bajar del coche y comer algo en el Bricktown que son antiguas fábricas y almacenes reconvertidos en tiendas, bares y restaurantes.

Con la panza ya llenita continuamos camino hasta la localidad de Clinton, típico pueblo de los estados llanos de USA y aquí cenamos y hacemos noche.

Día 7: Clinton - Amarillo: 279 Kms.

Hoy cambiamos de Estado y entramos en Texas, el segundo estado por extensión de Usa tras Alaska y por población tras California. Es bastante más grande que España pero con la mitad de población. Muy potente económicamente por el petróleo, el gas, la ganadería, agricultura e industrias de alta tecnología.

La ruta transcurre por el norte del Estado siguiendo la tónica de tierras llanas, cultivos y pastos. Se hace la ruta por la carretera vieja disfrutando de pueblos pequeños y paisaje como este depósito de agua inclinado.

Así llegamos hasta la ciudad de Amarillo con 200.000 habitantes, importante centro ganadero y además con plantas de ensamblaje de armas nucleares, por diversificar un poco.

Podemos ir a cenar al Rancho del Gran Bistec Texano, donde te ponen chuletones de dos kilos que te reglana si lo comes en menos de una hora.

Esto es Texas y en Texas todo a lo grande, y no es un dicho, es la relaidad de un Estado que una vez fue nuestro y ahora es el más independentista, por decirlo de alguna forma, donde su bandera gana en presencia a la americana.

Día 8: Amarillo - Santa Fe: 432 Kms.

Continuamos ya por zonas semidesérticas para adentrarnos en el Estado de Nuevo Mexico con más de 300.000 Kms 2 de extensión y una población que pasa por poco de los dos millones de habitantes, es decir, estamos solos. Eso sí no todo es desértico, como es tan grande también tiene zona de alta montaña y grandes bosques.
Conviene hacer una paradita en el pueblo de Santa Rosa, fundado por los españoles a orillas del río Pecos y muy típico, con lagos naturales cercanos y todo el sabor del típico oeste americano.

Nos desviamos algo de la ruta hasta llegar a la ciudad de Santa Fe, capital del Estado y bastante bonita con su arquitectura de adobe y madera. Además con muchas huellas de la cultura española y las antiguas culturas indias.






Dia 9 Santa fe - Alburquerque - Gallup:  334 Kms.

Otra etapa con larguísimas rectas y paisaje típico de película. Llegamos hasta Alburquerque que es la mayor ciudad del Estado con 800.000 habitantes. Cruzada por el mítico río Grande, la ciudad la fundaron los españoles a principios del siglo XVIII. Un lugar bueno para hacer una parada y darse n tranquilo paseo por su centro.
De aquí nos vamos hasta la locaidad de Gallup casi fronteriza con el Estado de Arizona para parar a cenar y dormir.

Día 10-11-12: Gallup - Monument Valley - Grand Canyon - Flagstaff: 700 Kms.

Partiendo de Gallup nos vamos a dentrar en el Estado de Arizona. Es conveniente pasar los siguientes tres días por la zona para ver paisajes y lugares realmente espectaculares. Aquí el  tema del alojamiento y distribución del tiempo es sobre la marcha. Sólo trataré de lo que hay que ver.

En primer lugar, saliendo de Gallup y siguiendo la ruta unos 140 Kms. llegaremos hasta el parque nacional del bosque petrificado. Forma parte de una gran desierto, que se llama el desierto pintado debido a las diferentes capas de minerales de las montañas, dando una variedad cromática y unos paisajes únicos.
Chelly
Se formó este lugar hace 225 millones de años (muchos no habiais nacido) y el bosque petrificado tiene la peculiaridad de mantener troncos de árboles fosilizados, pero el resto del paisaje es exactamente igual que todo el desierto pintado que se extiende en una amplia zona. Aquí ya es cosa de perderse con el coche y visitar el parque para luego subir hacia el Norte en dirección a Canyon de Chelly National Monument, territorio que pertenece en propiedad a los indios navajos y  es visitable en coche de manera gratuita; así vamos abriendo boca para cuando lleguemos al Grand canyon.

Continuamos ruta hacia Monument Valley, lugar que yo creo que no necesita mucha presentación porque lo habremos visto mil veces por televisión aunque, como todas las cosas, en vivo y en directo debe impresionar de una manera importante.




Y ya seguimos ruta para acabar en el que es sin duda uno de los lugares naturales más impresionantes del mundo: El Gran Cañón del río Colorado, con unas dimensiones colosales: 446 Kms. de largo, de 6 a 29 de ancho y hasta 1600 metros de profundo.
Parece mentira que un río como el colorado, que tampoco es tan grande haya podido hacer algo así calro que ha tenido cuatro millones de años para hacerlo.
Otro lugar que, aunque lo hayamos visto cientos de veces por la tele, verlo en persona tiene que ser grandioso porque es la única forma de hacerse a la idea de lo que significa un entorno natural de estas dimensiones. Sin duda uno tiene que emocionarse ante algo tan grandioso. No voy a poner ni fotos.

Tras este periplo por el desierto volvemos a la ruta 66 para dormir en Flagstaff, una localidad de algo más de 60.000 habitantes con una próspera economía sobretodo maderera gracias a su situación a los pies de una cordillera con enormes extensión de bosque.



Día: 13-14: Flagstaff - Las Vegas:  423 Kms.

Abandonamos el Estado de Arizona para pasar al de Nevada, por donde no transcurría la ruta 66, pero no vamos a dejar pasar de largo Las Vegas ya que estamos aquí.
Nevada cuenta con casi 300.000 Km2 y algo más de 2,5 millones de habitantes, es decir, muy despoblado aunque es cierto que va en aumento constante, en parte gracias a la ciudad de Las Vegas. Con diversidad de paisajes, grandes montañas y grandes desiertos.
El fin de esta etapa es llegar a Las Vegas y pasar casi dos días en la que una vez se llamó "la ciudad del vicio", pero que ahora se ha convertido en la ciudad que más crece de USA, que más turistas recibe y que cada vez diversifica más su economía aunque el juego siga ocupando una parte importante desde que en 1931 se legalizara el juego en Nevada, y lo que era una pequeña población llegara a ser lo que es hoy en día.
Lo idóneo para alojarse es buscar alguna oferta en algún hotel casino y darse un capricho por no mucho dinero. También hay que mirar la posibilidad de comer en los casinos donde es muy barato. Aparte de eso pues a disfrutar la noche y pegarse estos dos días un homenaje de los buenos a salir, después de 4000 kms de ruta y paisajes.

Dia 15 - 16 - 17: Las Vegas - Los Angeles: 450 Kms.

Con el cuerpo un poco perjudicado salimos de Las Vegas a iniciar la última etapa del viaje que nos llevará hasta el Estado de California que es el tercero más grnade, el más poblado y el más rico de EEUU, tanto que si fuera un país independiente estaría entre las diez primeras potencias mundiales.
Con una enorme variedad de paisajes y climas, desde grandes montañas y bosques a desiertos o playas.

Así llegaremos tranquilamente a la megalópolis de Los Ángeles fundada por los españoles en el siglo XVIII y ahora la segunda ciudad más grande de EEUU, con una enorme extensión que hace del coche algo imprescindible.

Después de todo el periplo, lo suyo es llegar hasta las playas de Santa Mónica que es donde termina la ruta  pegarnos un bañito en las aguas del Pacífico. El resto del tiempo que cada cual lo ocupe como crea conveniente, pero darse una vuelta hasta Holllywood no es mala idea.





Pues hasta aquí un esquema del viaje que yo haría y que si a alguien le sirve como principio de guía pues para algo habrá valido.